Yarvi, el hijo menor
del rey, nació con una malformación en una mano que ha llevado a todo el
mundo a considerarlo «medio hombre». Por eso, en lugar de convertirse
en guerrero como los demás varones de su estirpe, se ha dedicado a
estudiar los secretos de la Clerecía. En la víspera de la última prueba,
llega la noticia de que su padre y su hermano han sido asesinados, por
lo que él es el nuevo rey.
Pero tras una terrible traición a manos de sus seres más queridos, Yarvi se encontrará solo, en un mundo regido por la fuerza física y los corazones fríos. Incapaz de llevar armadura o de levantar un hacha, deberá afilar su mente. Cuando se junta a su alrededor una extraña hermandad de almas perdidas, descubrirá que esos compañeros inesperados tal vez puedan ayudarle a convertirse en el hombre que quiere ser.
Pero tras una terrible traición a manos de sus seres más queridos, Yarvi se encontrará solo, en un mundo regido por la fuerza física y los corazones fríos. Incapaz de llevar armadura o de levantar un hacha, deberá afilar su mente. Cuando se junta a su alrededor una extraña hermandad de almas perdidas, descubrirá que esos compañeros inesperados tal vez puedan ayudarle a convertirse en el hombre que quiere ser.
Me encantan esos libros que se desarrollan en un mundo inventado, en el que puede aparecer cualquier criatura, donde hay muchas traiciones, y que el mundo pueda ser un poco cruel. Solo he leído unos cuantos con esas características que me hayan gustado, y Medio rey es parte de esos.
<<Siempre hay una manera>>, acostumbraba a decirle su madre.
Tiene una historia que te muestra lo más bajo de la jerarquía. No te mete mucho en el tema de los reyes, del trabajo que debe hacer el rey, sino que vives el mundo de los esclavos. Personas a los que no tratan como tal, sino como si fuesen mercancía. Vives la parte cruel de todo este mundo.
Esta historia me atrapó desde el primer capítulo. Empieza un poco suave, para que le vayas cogiendo el ritmo, te vayas ubicando en él, y, aunque sea introductorio, no se vuelve nada pesado. Solo te dice lo esencial para que sepas de dónde aparecen los personajes y qué hacen ahí.
Y estos personajes de verdad me gustaron mucho. Y de alguna forma te enseñan que no hay personas "buenas" o "malas", sino que cada persona tiene sus razones para hacer determinadas acciones y creen que esa razón justifica lo que hacen. Además, de que hacen lo mejor que pueden con lo que tienen. No todos pueden gobernar un reino y tener todas las oportunidades a la mano.
Uno de los personajes, y el principal, es Yarvi. Una persona que a la vez de ser débil es fuerte, y al que le vi un notable desarrollo a lo largo del libro. Ha crecido pensando que por tener una mano deforme no es un hombre verdadero, que es medio hombre. Esto lo lleva a no entrenar como hicieron su padre y su hermano, y no llega a ser tan fuerte físicamente. En cambio, lo que entrena es su mente. Su mente que es el arma más poderosa que este hombre tiene y gracias a ella sobrevive. Si no fuese por el conocimiento que tiene, estuviese muerto como desde la mitad del libro. Eso me gustó del libro, no solo muestran que lo rudo o lo violento es lo más fuerte, sino que el conocimiento también puede serlo.
En la parte de la escritura, costaba un poco cogerle el ritmo al principio. Pero después de unas cuantas páginas se entiende el modo en el que se expresa el autor. Por momentos tiene terminologías complejas, que solo se entienden si conoces del tema, por lo que unas palabras puede que las tengas que buscar en un diccionario para darte una idea de lo que es, pero son muy pocas. Algo que me agradó es que hace que los personajes tengan como un tono sarcástico. Siempre me gusta que un libro me haga reír aunque no sea de comedia, por lo que disfruté esa parte en la historia.
En resumen, Medio rey es un libro ameno, que disfrutas mucho, más que todo si te gusta este género. Con unos personajes fuertes y bien definidos. Recomendado mucho a los que les guste esta clase de libros.