¡Hola, chicos!
Hoy, 4 de mayo, cumple la apreciada administradora de este bello blog. 19 primaveras(?) Ya saben, acepto cualquier regalo xD.
Espero se entretengan con la reseña, que fue un libro que yo disfruté bastante.
Diez personas sin
relación alguna entre sí son reunidas en un misterioso islote de la
costa inglesa por un tal Mr. Owen, propietario de una lujosa mansión en
el lugar a la par que un perfecto desconocido para todos sus invitados.
Tras la primera cena, y sin haber conocido aún a su anfitrión, los diez
comensales son acusados mediante una grabación de haber cometido un
crimen. Uno por uno, a partir de ese momento, son asesinados sin
explicación ni motivo aparente. Sólo una vieja canción infantil parece
encerrar el misterio de una creciente pesadilla.
Diez personas, desconocidas entre ellos, son invitados por un
misterioso señor, llamado Mr. Owen, a pasar unos días en una isla. Al
llegar suena una extraña grabación que acusa a cada uno de ellos de un
crimen que cometieron, alegando que todos fueron culpables y no se hizo
justicia.
Uno a uno, van muriendo en extrañas situaciones que solo pueden ser explicadas por
una canción de cuna, y no pueden salir de la isla al permanecer ésta
incomunicada por una tormenta. Deben averiguar quién es el asesino, pero
han buscado por toda la isla y no hay rastro de que haya otra persona
en ella, por lo que la conclusión es que el asesino es una de las diez
personas.
No sé cómo antes no he cogido este libro para leerlo. De verdad. Los personajes me gustaron bastante en su forma de ser. Excepto como unos dos o tres, que quieres es golpearlos de lo tontos y ridículos que son. Pero es su forma de ser, y se entiende que sean así. Y es que Agatha escribió sobre 10 personas completamente diferentes. Ninguna se parece en nada a la otra. Tienen estratos diferentes, creencias diferentes, pero supo cómo relacionarlos entre ellos.
Es un libro narrado en diferentes puntos de vista. Por lo que al cometerse un asesinato, o algún ataque, te vas enterando de los pensamientos que tiene cada uno, de lo que piensa del otro. Quién creen que es el culpable, pero siempre se dan cuenta muy tarde que no es esa persona que creían. Están constantemente cambiando de parecer, ya que en un momento van a creer que es una persona, pero terminan sospechando de otra. Y cualquiera puede ser porque todos tienen esa malicia de que pueden cometer cosas atroces.
Además, a lo largo de la historia te vas dando cuenta de que muchos mienten, que esconden información, y la información que tienen de ellos mismos puede ser relevante para descrubrir al asesino.
La narración es bastante fluida. Pensaba que iba a tener complicaciones con la narración, que no iba a entender nada por la época en la que fue escrita, pero, la verdad, las páginas pasan volando. Te puede disfrutar bastante el texto y te llegas a reir de los personajes, porque yo terminé riéndome de muchos comentarios que hacían. Sí hubo un poco de complicación en algunos diálogos. Me sorprendía la emoción que tenían los personajes cada vez que hablaban. Como si estuvieran felices de algo, lo cual no tiene nada de sentido. También en los diálogos, de pronto por la traducción, me perdía un poco. Es decir, unas partes estaban como sin sentido. Un personaje comentaba algo y otro decía algo que no venía al caso. Espero haya sido la traducción y no la autora.
En resumen, es un libro lleno de misterio y mucha intriga. No vas a saber quién es el verdadero asesino hasta el final, y cómo todo se conecta. Agatha supo cómo atraparte y que no sueltes el libro hasta terminarlo.